Se ha puesto en marcha una nueva iniciativa para apoyar la prevención y contención de las invasiones biológicas marinas a través del agua de lastre de los buques en el mar Mediterráneo. 

La iniciativa se centrará en el desarrollo de procedimientos armonizados para la implantación uniforme de aspectos específicos del Convenio sobre la gestión del agua de lastre (Convenio BWM) para los que es esencial la armonización regional en la región del mar Mediterráneo. El Convenio BWM exige a los buques que gestionen sus aguas de lastre de manera que los organismos acuáticos perjudiciales y agentes patógenos se eliminen o se conviertan en inofensivos antes de que el agua de lastre se vierta en un nuevo lugar. Esto protege la biodiversidad y los recursos al evitar la propagación de especies acuáticas invasivas, así como de agentes patógenos potencialmente dañinos.

El objetivo de la iniciativa es promover el desarrollo de esfuerzos coordinados y medidas de gestión para hacer frente a las invasiones potencialmente dañinas de especies acuáticas en toda la región del mar Mediterráneo. En particular, el proyecto abordará las exenciones en virtud de la regla A-4 del Convenio BWM, incluidos los protocolos regionales pertinentes para los reconocimientos portuarios y las evaluaciones de riesgos, y la designación de zonas de cambio del agua de lastre, mientras que otros aspectos que se considerarán también incluirán las instalaciones de recepción de sedimentos, los procedimientos de notificación previa a la llegada, las medidas para contingencias y las medidas adicionales previstas en la regla C-1 del Convenio BWM.

Esta actividad también tendrá en cuenta los trabajos realizados y la experiencia práctica adquirida en otras regiones, como el Atlántico nordeste y el mar Báltico. Esto incluirá varias fases de consulta con las Partes Contratantes del Convenio para la protección del medio marino y de la región costera del Mediterráneo (Convenio de Barcelona).

Se espera que el proyecto de procedimientos armonizados resultante se prepare a finales de año y se finalice tras una reunión regional de expertos prevista, en principio, para marzo de 2023 en Malta, con miras a su adopción posterior por las Partes Contratantes del Convenio de Barcelona.

El proyecto cuenta con el apoyo del Programa integrado de cooperación técnica (PICT) de la OMI a través del Centro regional de emergencia para la lucha contra la contaminación en el mar Mediterráneo (REMPEC), en cooperación con el Centro regional de actividades para zonas especialmente protegidas (RAC/SPA).