El Subcomité de prevención y lucha contra la contaminación (Subcomité PPR) ha aprobado las Directrices revisadas para el control y la gestión de las incrustaciones biológicas de los buques a los efectos de reducir al mínimo la transferencia de especies acuáticas invasivas, tras un examen exhaustivo de las mismas. Se produjo durante el 10º periodo de sesiones del Subcomité (PPR 10) celebrado del 24 al 28 de abril, y sigue a un examen exhaustivo de las Directrices.
Las incrustaciones biológicas son la acumulación de organismos acuáticos en las superficies y estructuras sumergidas o expuestas al medio acuático, como buques y otras estructuras mar adentro. Una buena gestión de las incrustaciones biológicas puede contribuir a proteger la biodiversidad marina evitando la transferencia de especies acuáticas invasivas (Más información aquí). Mantener limpio el casco de un buque también puede reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero al mejorar la eficiencia en términos de consumo de carburante; veáse el informe en inglés Analysing the Impact of Marine Biofouling on the Energy Efficiency of Ships and the GHG Abatement Potential of biofouling Management Measures (Análisis de las repercusiones de las incrustaciones biológicas marinas en la eficiencia energética de los buques y potencial de reducción de los GEI de las medidas de gestión de las incrustaciones biológicas).
Las Directrices 2023, que amplían y actualizan la versión anterior con miras a reforzarla y aumentar su aceptación, se presentarán al Comité de protección del medio marino (MEPC 80) para su adopción.
El Subcomité también se mostró de acuerdo con elaborar orientaciones sobre los sistemas de limpieza de incrustaciones biológicas de los buques en el agua en una futura reunión. A este respecto, el Subcomité recomendó al MSC 80 que se prorrogue hasta 2025 el plazo de ultimación previsto para las directrices y que el título del resultado se cambie por "Elaboración de orientaciones sobre cuestiones relativas a la limpieza en el agua". El Subcomité invitó a presentar propuestas concretas sobre las orientaciones por separado.
El Subcomité también invitó a los Estados Miembros y a las organizaciones internacionales a que presenten a la Organización la información pertinente sobre las mejores prácticas para las inspecciones de las incrustaciones biológicas y las medidas de limpieza, conforme estén disponibles en el futuro.
Las Directrices sobre las incrustaciones biológicas se adoptaron por primera vez en 2011. El periodo de sesiones MEPC 72 (2018) decidió iniciar un examen para tener en cuenta las mejores prácticas y la experiencia, así como las últimas investigaciones. Al llevar a cabo este examen, el PPR 8 (2021) acordó que debían revisarse las Directrices.
Un documento separado de orientaciones ofrece asesoramiento a los propietarios y armadores de embarcaciones de recreo de menos de 24 m de eslora. Orientaciones para reducir al mínimo la transferencia de especies acuáticas invasivas debida a la contaminación biológica (incrustaciones en el casco) de las embarcaciones de recreo (MEPC.1/Circ.792).
El Proyecto de asociaciones GloFouling FMAM-PNUD-OMI y conexo Proyecto sobre incrustaciones biológicas TEST (transferencia de tecnologías ambientalmente racionales), del Organismo Noruego de Cooperación para el Desarrollo (Norad), ayudan a los países en desarrollo a implantar las Directrices sobre las incrustaciones biológicas.
Se acuerdan recomendaciones para el transporte marítimo de pellets de plástico
Otros temas del orden del día del PPR 10 incluyeron el transporte marítimo de pellets de plástico.
Los riesgos para el medio marino de los pellets de plástico se han puesto de manifiesto en sucesos como el del X-Press Pearl en 2021, en el que se derramaron 11.000 toneladas de pellets de plástico frente a las costas de Sri Lanka.
El Subcomité acordó un proyecto de circular MEPC sobre recomendaciones relativas al transporte marítimo de pellets de plástico en contenedores de carga. El proyecto de texto se presentará al Subcomité de transporte de cargas y contenedores (CCC 9), que se reúne del 20 al 29 de septiembre, para que haga sus aportaciones.
El proyecto de circular recomienda que los pellets de plástico deberían envasarse en embalajes/envases de buena calidad que sean lo suficientemente fuertes para resistir los choques y las cargas que suceden normalmente durante el transporte. Los embalajes/envases deberían estar fabricados y cerrados de forma que no se produzca ninguna pérdida de contenido en las condiciones normales de transporte, a causa de vibraciones o fuerzas debidas a la aceleración.
Puede leer un resumen completo del PPR 10 aquí.