Los días 26 y 27 de septiembre se celebró en La Habana (Cuba) un cursillo nacional presencial para ayudar a Cuba a ratificar e implantar el Convenio sobre los sistemas antiincrustantes (Convenio AFS).
El Convenio AFS establece controles sobre determinadas sustancias perjudiciales en los sistemas antiincrustantes, incluidos los compuestos organoestánnicos como el tributilestaño y (a partir de 2023) la cibutrina, y prevé un mecanismo para la introducción de controles sobre otras sustancias en el futuro.
Los participantes en el cursillo, en su mayoría personal gubernamental y partes interesadas, fueron sensibilizados sobre las medidas que Cuba debería adoptar a escala nacional para ratificar y, posteriormente, implantar y hacer cumplir plenamente el Convenio AFS. En el cursillo se trataron aspectos técnicos y normativos de los sistemas antiincrustantes y se evaluó la preparación de Cuba para implantar y hacer cumplir eficazmente el Convenio AFS tras su ratificación. El programa del cursillo incluyó presentaciones y una visita a un dique seco, que ofreció a los participantes la oportunidad de ver en la práctica y debatir aspectos relevantes que afectan a la implantación y el cumplimiento de la normativa, como la inspección y la gestión de residuos.
Organizado por la Administración Marítima de Cuba, este cursillo nacional, que inicialmente estaba previsto anteriormente para 2020, pero se aplazó debido a la pandemia de COVID-19, es la continuación de un cursillo regional sobre el Convenio AFS para la región del Caribe, que se celebró en Trinidad y Tabago en 2018. Cuba está trabajando para ratificar el Convenio AFS.
Desde la adopción del Convenio AFS en 2001, la OMI ha organizado cursillos nacionales y regionales para animar y asistir a los países en la ratificación del convenio y en su implantación y cumplimiento eficaz. El número de Estados firmantes del convenio sigue aumentando y asciende actualmente a 96 países, que representan el 96,03% del tonelaje de la marina mercante mundial. Esto contribuye a mejorar la protección del medio marino.
El cursillo se llevó a cabo a través del Programa integrado de cooperación técnica (PICT) de la OMI, con el apoyo del Centro de actividades regionales/Centro regional de información y formación sobre la contaminación del mar en casos de emergencia, del Gran Caribe (REMPEITC-Caribe).