El Convenio sobre la gestión del agua de lastre (Convenio BWM) de la OMI fue el tema central de un cursillo nacional celebrado en Edea (Camerún) del 14 al 16 de mayo.
En el cursillo 30 funcionarios públicos recibieron formación sobre cómo implantar y hacer cumplir el Convenio BWM, cuyo objetivo es prevenir la propagación de organismos acuáticos perjudiciales en el agua de lastre de los buques de una región a otra.
Entre los temas abordados figuran: una visión general de la gestión del agua de lastre, el Convenio y las Directrices conexas; comprender las obligaciones que incumben a las partes en virtud del Convenio; vigilancia del cumplimiento, vigilancia y ejecución de la normativa para la supervisión por el Estado rector del puerto; y mitigación del riesgo. A través de presentaciones, debates en grupo y ejercicios de escenificación, los funcionarios públicos mejoraron su conocimiento y comprensión del proceso de implatanción y cumplimiento del Convenio.
El objetivo era reforzar la capacidad nacional de Camerún para la implantación y el cumplimiento eficaz del Convenio, y mejorar la red de expertos con formación en la gestión y el control del agua de lastre. Camerún ratificó el Convenio en 2022. El Convenio BWM entró en vigor en 2017, lo que representa un paso significativo hacia la protección del medio marino, para prevenir la transferencia de especies acuáticas invasoras a través de los buques. El Convenio obliga a todos los buques a gestionar el agua de lastre y los sedimentos de acuerdo con un plan de gestión específico para cada buque. Todos los buques deben llevar también un Libro registro del agua de lastre y un Certificado internacional de gestión del agua de lastre.
El cursillo fue organizado por la OMI y acogido por la Dirección de Asuntos Marítimos y Vías Navegables de Camerún. El cursillo se realizó a través del Programa integrado de cooperación técnica (PICT) de la OMI.