Las autoridades de Kenya han concluido un ejercicio multiinstitucional destinado a reforzar las capacidades y la coordinación en materia de protección marítima para combatir las actividades ilícitas en el mar, el primero de este tipo realizado en el país.

El ejercicio USALAMA BAHARINI '24 fue organizado conjuntamente por EUNAVFOR ATALANTA, la Organización Marítima Internacional (OMI) y el Departamento de Estado para Asuntos Marítimos y Navieros de la República de Kenya. 

Realizada en Mombasa (Kenya) del 20 al 24 de mayo, la iniciativa forma parte del apoyo de la Unión Europea a la Enmienda de Jeddah al Código de Conducta de Djibouti. 

La Enmienda de Jeddah al Código de Conducta de Djibouti es una iniciativa regional para combatir los actos de piratería, los robos a mano armada contra los buques y otras actividades marítimas ilícitas en el océano Índico occidental y el golfo de Adén. Está basada en el Código de Conducta de Djibouti (DCOC), que se adoptó por primera vez bajo los auspicios de la OMI en 2009 para para abordar los casos de piratería y robos a mano armada perpetrados contra los buques. 

El objetivo del ejercicio USALAMA BAHARINI '24 era mejorar las capacidades de protección marítima y potenciar el intercambio de información, la coordinación y la interoperabilidad. 

Participaron unos 120 representantes de organismos del Comité nacional de protección marítima de Kenya, entre ellos la marina, el servicio de guardacostas y las autoridades marítimas y portuarias del país, junto con asociados como la OMI, Go Blue, la Delegación de la UE en Kenya y la Embajada de España en Kenya. 

El programa incluía tanto seminarios jurídicos como ejercicios prácticos en el mar. Estas actividades abarcaron desde ejercicios portuarios y el uso de la plataforma IORIS (Intercambio Regional de Información del Océano Índico, por sus siglas en inglés) hasta la realización de operaciones de búsqueda y salvamento (SAR), operaciones de interdicción marítima y operaciones especiales. Los simulacros con helicópteros, lanchas rápidas y vehículos aéreos no tripulados (UAV) permitieron a los participantes aplicar protocolos y buenas prácticas a situaciones reales.

Se prestó especial atención al tema del acabado o procesamiento legal de los piratas, dados los continuos problemas de protección marítima en el mar Rojo y el resurgimiento de la piratería en la región.

Todas las actividades se adaptaron para satisfacer los intereses marítimos de Kenya y ayudar al país a cumplir sus obligaciones internacionales y regionales.

Entre los organismos del Comité nacional de protección marítima de Kenya que asistieron al ejercicio figuraban el Servicio de Guardacostas de Kenya, la Autoridad Marítima de Kenya, la Autoridad Portuaria de Kenya, la Marina de Kenya, la Fiscalía General, la Oficina del Director de la Fiscalía Pública, el Servicio Nacional de Inteligencia, el Servicio Nacional de Policía, el Servicio de Vida Silvestre de Kenya, los Servicios de Pesca de Kenya, la Autoridad Tributaria de Kenya, la Dirección de Servicios de Inmigración y el Servicio Forestal de Kenya.