Preparación y lucha contra la contaminación


Las iniciativas adecuadas de prevención pueden contribuir considerablemente a reducir los riesgos de contaminación procedente de los buques. No obstante, a pesar de hacer todo lo posible, inevitablemente se producirán derrames. Cuando ello ocurre, es necesario asegurarse de que se cuenta con medidas eficaces para la preparación que garanticen una respuesta oportuna y coordinada que limite las consecuencias adversas de los sucesos de contaminación relacionados con hidrocarburos y sustancias nocivas y potencialmente peligrosas (SNPP).

El Convenio internacional sobre cooperación, preparación y lucha contra la contaminación por hidrocarburos, 1990 (Convenio de cooperación) es el instrumento internacional que establece un marco destinado a facilitar la cooperación internacional y la asistencia mutua con miras a la preparación y respuesta frente a sucesos importantes de contaminación por hidrocarburos y prescribe que los Estados planifiquen y se preparen mediante la elaboración de sistemas nacionales para la lucha contra la contaminación en sus respectivos países y mediante el mantenimiento de capacidad y recursos adecuados para hacer frente a las emergencias debidas a la contaminación por hidrocarburos.
 
El Protocolo sobre cooperación, preparación y lucha contra los sucesos de contaminación por sustancias nocivas y potencialmente peligrosas, 2000 (Protocolo de cooperación-SNPP) amplía este marco normativo para abordar los sucesos de contaminación relacionados con sustancias nocivas y potencialmente peligrosas, a saber, productos químicos.
 
Los Estados Partes en el Convenio de cooperación y el Protocolo de cooperación-SNPP están obligados a establecer un sistema nacional para responder a los sucesos de contaminación por hidrocarburos y SNPP que incluya una autoridad nacional designada, un punto nacional de contacto operativo y un plan nacional para contingencias. Todo ello ha de estar apoyado por un nivel mínimo en cuanto al equipo de respuesta, los planes de comunicaciones y las actividades de formación y los ejercicios periódicos.
 
Además de la prescripción relativa a la implantación de sistemas nacionales de respuesta, ambos instrumentos también fomentan la cooperación entre las Partes mediante el establecimiento de acuerdos bilaterales y multilaterales para incrementar la capacidad de respuesta a escala nacional, cuando sea necesario. Lo que es más importante: el Convenio de cooperación y el Protocolo de cooperación-SNPP establecen un mecanismo para que las Partes soliciten asistencia de cualquier otro Estado Parte, cuando hagan frente a un suceso importante de contaminación.

Existen diversas ventajas importantes para aquellos Estados que se adhieran a dichos instrumentos, en particular:

  • Acceso a una plataforma internacional para la cooperación y asistencia mutua en la preparación y lucha contra sucesos importantes de contaminación por hidrocarburos y SNPP y a un mecanismo para el establecimiento de acuerdos de cooperación con sus otros Estados Parte.
  • Un medio para acceder de manera urgente a la asistencia técnica y los recursos de respuesta pertinentes en caso de que se produzca un suceso de derrame de hidrocarburos o SNPP. 
  • Un marco para la creación de capacidad nacional y regional con miras a la preparación y lucha contra sucesos de derrames de hidrocarburos o SNPP. 
  • Participación en una red de intercambio de información nueva sobre investigación y desarrollo, mejores prácticas y experiencias de carácter práctico en relación con la lucha contra derrames de hidrocarburos y SNPP.
  • Acceso a formación y apoyo para la creación de estructuras y legislación básicas en la preparación y lucha contra derrames, a escala nacional y regional, a través del Programa integrado de cooperación técnica de la OMI.